Al momento de invertir en equipos para una lavandería industrial, una de las decisiones más importantes es elegir el tamaño adecuado de las máquinas. No es lo mismo comprar un lavarropas industrial para una planta hospitalaria que una lavadora convencional para un gimnasio pequeño. Una máquina sobredimensionada puede generar gastos innecesarios de agua, detergente y energía, mientras que una demasiado pequeña limitará la productividad y afectará directamente la rentabilidad del negocio.
En este artículo te contamos cuáles son los principales aspectos que debés tener en cuenta para elegir correctamente entre un lavarropas industrial, una centrífuga o centrifugadora, y un secador o secarropa industrial, según el tamaño de tu emprendimiento.
1. Analizá el volumen de trabajo
El primer paso es calcular la cantidad de ropa que se procesa diariamente. Esto es clave para determinar si necesitás un equipo de baja, media o gran capacidad.
- Pequeños hoteles, hostels o gimnasios → pueden trabajar con un lavarropas industrial de 15 a 25 kg, acompañado de un secarropa de capacidad similar y una centrífuga compacta.
- Lavanderías medianas, clínicas y spas → requieren lavadoras industriales de 30 a 50 kg, junto a una centrifugadora robusta y un secador industrial para mantener un flujo continuo.
- Grandes hospitales, cadenas hoteleras o plantas industriales → lo recomendable son lavarropas industriales de 60 kg en adelante, con centrífugas de alta velocidad y secadores de gran capacidad que permitan procesar grandes volúmenes sin interrupciones.
2. Considerá la frecuencia de los ciclos
No solo importa el peso de carga, sino también cuántos ciclos de lavado, centrifugado y secado se realizan por día.
- Si la lavandería trabaja con pocas tandas diarias, se puede optar por un lavarropas industrial de gran capacidad para concentrar el trabajo.
- Si la operación es continua, lo más eficiente suele ser combinar varias lavadoras industriales medianas con centrífugas y secarropas de menor tamaño, lo que permite mantener la producción sin cuellos de botella.
Una lavadora convencional de uso doméstico en estos casos se queda corta: no está diseñada para soportar cargas pesadas ni ciclos intensivos de trabajo.
3. Espacio disponible en tu planta
Un factor muchas veces olvidado es el espacio. Los lavarropas industriales, centrifugadoras y secadores requieren un área adecuada para:
- Instalación correcta.
- Acceso a conexiones de agua, electricidad y vapor.
- Circulación segura del personal.
- Espacio para mantenimiento y repuestos.
Antes de elegir el tamaño del lavarropas industrial o la centrífuga, medí tu sala de lavandería y verificá que el lugar se adapte al equipo.
4. Costos operativos y eficiencia
Cada ciclo de un lavarropas industrial implica consumo de agua, detergente y energía. Una máquina sobredimensionada puede terminar generando gastos innecesarios, mientras que una muy chica hará que debas repetir tandas y aumentar la carga horaria de trabajo.
Las centrífugas industriales ayudan a reducir el tiempo de secado, lo que disminuye el uso del secador o secarropa y permite ahorrar energía. Por eso es importante analizar la combinación completa del sistema:
- Lavadora industrial + centrífuga → reduce la humedad y acelera procesos.
- Centrifugadora + secarropa industrial → optimiza costos energéticos.
Lo ideal es encontrar un equilibrio entre capacidad y eficiencia para que cada ciclo sea rentable.
5. Proyección de crecimiento
La compra de un lavarropas industrial o un secarropa de gran porte no debe pensarse solo para el presente. Si tu lavandería tiene planes de crecer, conviene invertir en equipos que acompañen esa expansión. De lo contrario, en pocos años deberás reemplazarlos.
Un buen ejemplo es combinar una lavadora convencional de apoyo para tandas chicas con un lavarropas industrial grande para el trabajo principal. Así se cubren tanto necesidades actuales como futuras.
Conclusión
Elegir el tamaño adecuado de un lavarropas industrial, una lavadora convencional, un secador/secarropa o una centrífuga/centrifugadora depende de analizar cinco factores: volumen de trabajo, frecuencia de ciclos, espacio disponible, costos operativos y proyección de crecimiento.
En Roncoli acompañamos a cada cliente en este proceso, ofreciendo asesoramiento personalizado y una amplia gama de lavadoras industriales, centrifugadoras y secadores que se adaptan a cualquier escala: desde pequeños hoteles hasta grandes plantas hospitalarias.
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